Guia v5/Internet con Firefox
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Internet con Firefox
Firefox [1] (http://www.mozilla-europe.org/es/products/firefox/) es un popular navegador de Internet, compatible no sólo con sistemas operativos libres sino también con MS Windows y Mac OS X. Se le asocia al lado auténtico de la red gracias a su árbol genealógico, sus competitivas prestaciones y su desarrollo abierto sobre software libre. La campaña Difunde Firefox (Spread Firefox, en inglés) es considerada un ejemplo de marketing vírico de bajo presupuesto ejecutado por una entusiasmada comunidad.
Aunque su uso sigue siendo minoritario en el conjunto de Internet, las estadísticas marcan un claro incremento de su mordisco al monopolio ejercido por MS Internet Explorer. Los principales factores de conversión son la mejor protección ante virus, spyware y ventanas emergentes, así como funcionalidades muy prácticas como las pestañas o extensiones.
Su uso es bastante sencillo, pero si queremos aún más sencillez podemos probar con Epiphany, pariente próxima, nativa de GNOME.
Lo que hay que saber
Firefox gusta porque hace bien lo que tiene que hacer, pero además por llevar ventaja competitiva en algunos puntos. Una de estas ventajas comentadas entre los usuarios de MS Windows es una mejor protección ante virus y spyware, pero hoy por hoy los usuarios de GNU/linux estamos estructuralmente bastante protegidos contra estos riesgos.
Vamos a ver qué más ofrece el navegador de moda.
La maravilla de las pestañas
Tradicionalmente se ha navegado a razón de una aplicación por ventana. Es decir, si estamos navegando por una ventana y queremos abrir otra ventana para saltar a otra página sin perder la actual, no nos quedaba otra posibilidad que abrir una Nueva ventana, lo que nos abría un segundo navegador. Tras una hora de navegación, nuestra barra de tareas podía acabar teniendo a decenas de navegadores o exploradores abiertos. En cambio...
Archivo > Nueva pestaña (o Ctrl-T)
Ahora tenemos dos pantallas, dos pestañas, bajo una misma ventana. Y podemos tener tantas como queramos. Movernos entre ellas es más sencillo, el ratón tiene que recorrer menos camino y el interfaz general se mantiene intacto. A primera vista puede parecer que no hay para tanto, pero quienes empiezan a probar las pestañas no tardan en poner el icono de Nueva pestaña en la barra de herramientas de navegación:
Ver > Barras de herramientas > Personalizar...
La forma más habitual de abrir nuevas pestañas es seleccionando enlaces en la página web activa con la tecla derecha del ratón y seleccionando Abrir en una nueva pestaña en el menú contextual, aunque si dispones de botón central o rueda en el ratón, basta clicar en cualquiera de ellos para abrir la web a la que apunta ese enlace en una nueva pestaña. Y rizando el rizo, descubrimos una nueva ventaja: en la ventana activa se nos muestra la última pestaña abierta. Existen múltiples configuraciones para la visualización y apertura de nuevas páginas, opción configurable desde el menú Editar > Preferencias
Hay dos acciones más relacionadas con pestañas que marcan la diferencia:
Editar > Preferencias > Principal
La página de inicio es una funcionalidad útil. Tan útil que nos podemos preguntar... ¿por qué tiene que ser sólo una? Muchos de nosotros empezamos el día visitando varias páginas web. Pues bien, gracias a las pestañas podemos tenerlas todas abiertas cada vez que iniciemos Firefox.
Para definir las páginas web que queremos tener de inicio debemos tenerlas todas cargadas en pestañas e ir a las Preferencias del programa. En Página de inicio clicamos en Páginas actuales y ya está.
Marcadores > Añadir pestañas a Marcadores...
Podemos guardar todas las pestañas abiertas de una vez y en una misma carpeta de marcadores con una sola acción. Tan sólo tenemos que seleccionar la opción Añadir pestañas a Marcadores.
Todo tipo de buscadores
Firefox integra en su barra de herramientas de navegación un buscador que por defecto apunta a Google. Pero hay más, muchos más. Si clicamos en el logotipo del buscador se nos despliega una lista de buscadores especializados. Y al final tenemos una opción para Administrar motores de búsqueda.
La mayoría de los buscadores disponibles son especializados. Es decir, no buscan en la Internet entera como Google o Yahoo!, sino en webs con grandes volúmenes de contenido como enciclopedias en linea, diccionarios descriptivos y de traducción, tiendas, medios de comunicación, bibliotecas en linea... Hay centenares de buscadores, que podemos instalar a partir de Mozdev [2] (http://mycroft.mozdev.org/).
Por ejemplo, si queremos añadir un buscador al Diccionario de la Real Academia de España introducimos "DRAE" en el buscador y nos aparecen dos enlaces, uno para búsquedas exactas y otro para búsquedas aproximadas. Clicamos en el enlace que prefiramos y una ventana nos pedirá confirmación para instalar el buscador. Aceptamos, esperamos un poco y ya lo tenemos disponible en la lista de buscadores. Firefox toma como buscador por defecto el último que hayamos utilizado.
Hay dos funcionalidades también interesantes relacionadas con el buscador:
- Si sentimos que hoy es nuestro día de suerte podemos introducir una palabra o frase directamente en la barra de direcciones. Aterrizaremos directamente en una página... que igual es la que buscamos. Pero ojo, que hay sospechas de que Google utiliza esta curiosa funcionalidad con fines comerciales.
- Por lo que respecta a la búsqueda de palabras en la página que estamos visitando, Ctrl-F es la solución (adictiva) a nuestros problemas. Su utilidad es incuestionable, especialmente cuando tratamos de localizar palabras o cadenas de caracteres en una página web que tiene una extensión considerable.
Marcadores dinámicos
Los marcadores, populares también por su denominación inglesa bookmarks, son una funcionalidad básica de todo navegador. Cuando hemos dado con una web que queremos recordar tecleamos Ctrl-D y su URL, su dirección en Internet, se almacenarán bajo Marcadores. Podemos gestionar marcadores de una forma similar a como manejamos nuestros archivos y carpetas en el sistema. Pero merece la pena hablar de los marcadores dinámicos, una categoría especial y más reciente de bookmarks.
Una de las tecnologías emergentes y cada vez más disfrutadas en Internet son los feeds, los suministros de titulares. Relacionado con el fenómeno blog, el protocolo RSS (Rich Site Summary, o más o menos Resumen Enriquecido del Sitio) y sus allegados nos permiten captar y transportar titulares de noticias sin tener que ir a visitar la web para ver qué hay de nuevo.
Firefox facilita enormemente la consulta de titulares, a través de la funcionalidad de marcadores dinámicos. Cuando una página web dispone de titulares sindicables (enlazables, coleccionables...) un icono de un característico color naranja se activa en la parte derecha de la barra de dirección URL. Si lo clicamos, se mostrará una vista de los títulares ofrecidos por la web. Se puede proceder la suscripción usando el própio Firefox, además de poder usar otros métodos. Si clicamos en Suscribirse ahora se nos pedirá añadir como si fuera un marcador cualquiera. Si lo añadimos, a partir de ese momento los titulares nos aparecerán bajo la correspondiente entrada en Marcadores.
Por supuesto, para consultar la lista actualizada de marcadores dinámicos no tenemos que volver a visitar esa página. Tan solo volviendo a Marcadores y clicando en la suscripción correspondiente obtendremos un menú desplegado con las novedades más recientes. Clicando cualquiera de ellas iremos a su respectiva página web. O podemos abrirlas todas en diferentes pestañas.
Control sobre ventanas emergentes
Hubo un tiempo en el que los pop-ups, ventanas emergentes de diversos tamaños y discutida utilidad, amenazaban con apoderarse de la superficie útil de la pantalla. Algunos se plantaban ante nuestras narices ocultando el contenido que queríamos consultar. Otros aparecían como setas, o como bacterias, y matar uno implicada el nacimiento de varios. Otros nos llevaban a páginas web a las que de hecho no queríamos ir. Eran engañosos, molestos y ponían a prueba la paciencia del más metódico.
Para más inri, un buen porcentaje de ellos trabajaba para la industria de la pornografía, por lo que la emergencia de ventanas nos podía poner en situaciones embarazosas en aulas de informática, bibliotecas públicas, cibercafés transitados o, lo peor, en el día en que bautizábamos a nuestra madre en el manejo de Internet. Y todo podía comenzar de súbito, aterrizando en el resultado incierto de una búsqueda cualquiera.
Editar > Preferencias > Contenido
Cuando Mozilla resolvió este problema con una simple cajita a seleccionar, muchos respiramos tranquilos y recuperamos la calma de navegar sin la indeseada emergencia de pop-ups. Cuando una web nos lanza ventanas emergentes un mensaje en la parte superior de la pantalla nos avisa de que
Firefox evitó que este sitio abriera una ventana emergente.
Clicando en el botón Preferencias podemos escoger entre autorizar ventanas emergentes para el sitio que estamos visitando, gestionar las webs autorizadas a enviarnos este tipo de ventanas o no mostrar más este mensaje.
Extensiones
El principal no-secreto de Firefox para ser un navegador ágil y eficiente es ofrecer una instalación por defecto relativamente ligera, sin añadidos innecesarios. Pero paralelamente a esto, Firefox ofrece unas especificaciones a desarrolladores para programar las denominadas extensiones. Y en relativamente poco tiempo las extensiones han sido todo un éxito y hay cientos de ellas.
Podemos buscar y hurgar extensiones en la web de Mozilla [3] (http://addons.mozilla.org/). Una vez localizada una extensión que nos interese tan sólo tenemos que clicar en Install now (Instalar ahora) y tras un breve lapso la extensión será operativa en nuestro navegador.
Algunos ejemplos de extensiones populares:
- FlashGot gestiona múltiples descargas de forma simultánea. Imaginemos que llegamos a una galería de fotos libres de los Alpes suizos y nos gustan todas. Con esta extensión bajarlas es sólo cuestión de un clic, y el tiempo de descarga.
- Adblock un escudo protector contra varios tipos de publicidad intrusiva. Ataca los anuncios de raiz.
- Ambience, para amigos de la primavera y el colorido. Interpreta los estilos de diseño de la página web que estamos visitando y los aplica al interfaz del propio navegador de forma camaleónica.
- PingPong convierte la ventana del navegador en el primer juego de consola que tuvimos los ya no tan jóvenes.
- gTranslate permite consultar la página que estamos visitando en varios idiomas, basándose en el motor de traducciones automáticas de Google.
- Bookmarks Synchronizer nos lleva los marcadores allí donde los necesitemos, sea cual sea el equipo o el sistema operativo utilizado.
Y hay muchísimas más. Cuidado con las extensiones que despiertan adicción y para los predispuestos se acaban convirtiendo más en un fin que en un medio. Un disfrute en sí.
Podemos gestionar nuestras extensiones en Herramientas > Complementos
Conectores
Los conectores, conocidos también por su denominación en inglés plugin, son ampliaciones que nos permiten acceder a diversos formatos de archivos en Internet. No hay que confundirlos con las extensiones que, como hemos visto, son funcionalidades añadidas a las propias del navegador. La mayoría de contenidos en Internet son documentos HTML o similares (XHTML, PHP, etc), así como imágenes (JPG, PNG, GIF...). El navegador interpreta y muestra correctamente estos archivos, pero hay muchos otros tipos que pueden aparecer por el camino.
Cuando el navegador topa con un tipo de archivo que no reconoce o para el cual no tiene visualizador, nos aparece un mensaje en pantalla que nos indica que es necesario instalar un conector para visualizar ese contenido. Lo más probable es que esto nos suceda con páginas muy gráficas o de juegos en linea que requieran Flash o Java, así como enlaces o emisiones de sonido y video que requieran RealPlayer o Windows Media Player.
Firefox tiene un buen motivo para no venir de serie equipado con estos conectores: la mayoría de estos formatos no son libres y dependen de la autorización de sus propietarios. Dado que Firefox sí es software libre, el hecho de incorporar estos conectores limitaría la posibilidad de distribución del programa.
También hay otros formatos libres que sí se podrían redistribuir bajo Firefox, pero recordemos que la intención de los desarrolladores de este navegador es mantener la aplicación central lo más ligera y ágil posible.
Por estas dos razones Firefox deja la instalación de conectores a los usuarios. Bajo GNU/Linux la instalación de conectores es cada vez más sencilla, siendo un proceso semiautomático en muchos casos.
El conector de Java ha tenido el triste mérito de liderar el ranking de complejidad, para desidia de muchos usuarios noveles. Hoy día la instalación de este conector es más sencilla, pero los usuarios de Guadalinex V4 no tienen ni que preocuparse de esto, ya que su versión de Firefox lleva el conectar Java preinstalado.
El conector que echaremos en falta será el de Flash, pero una elemental aplicación se encarga de su instalación automática desde el propio Firefox cuando se encuentre una web que hace uso del plugin mediante un mensaje en la parte superior con un botón: Instalar los plugins que faltan...
Configurando Firefox
Algunas de las características más novedosas del navegador del zorro de fuego ya han sido comentadas, pero quedan otras no menos importantes que harán de nuestra navegación por Internet algo más que un viaje placentero. No hay más que abrir el menú Editar > Preferencias para comprender la sencillez y la versatilidad del navegador Firefox. Nada más desplegarse encontramos siete grandes categorías:
- Principal configuración para las descargas, la página de inicio y valores del sistema.
- Pestañas comportamiento de las pestañas.
- Contenido gestiona tipos de letra y colores, opciones sobre las páginas y los tipos de archivos.
- Canales para mostrar un resumen de titulares o suscribirse directamente a un RSS.
- Privacidad controla cuestiones relativas a historial, caché, cookies o formularios.
- Seguridad comportamiento respecto a las contraseñas, instalación de componentes, ...
- Avanzadas configura aspectos tan importantes como accesibilidad, navegación, pestañas, seguridad...
Migrar desde MS Internet Explorer
Es comprensible que los usuarios que hayan hecho un uso intensivo de MS Internet Explorer tengan reticencias a cambiar a un nuevo navegador por más ventajas que este tenga. Firefox incorpora una utilidad para importar los datos que no queremos perder: favoritos (marcadores), opciones, cookies y contraseñas almacenadas. Lo único que tenemos que hacer es exportar estos datos desde la utilidad de exportación de Explorer, copiarlos, ubicarlos en nuestra carpeta personal e importarlos con el asistente de Firefox.
En principio no debería haber ningún problema, puesto que los ficheros que se manejan son de texto y bastante transmitibles. Aun así, si vemos que estamos perdiendo datos por el camino una opción alternativa es instalar Firefox para MS Windows en el mismo sistema en el que tengamos Explorer, realizar allí la exportación/importación. Si los datos son migrados correctamente a Firefox en MS Windows podremos exportarlos de nuevo, que con seguridad serán bien asimilados por Firefox en GNU/Linux.
De esta forma hacemos dos saltos correlativos en vez de un doble salto... ¿mortal?
El descendiente de una familia ilustre
La relación entre Firefox y Explorer tiene un regusto al culebrón de Bin Laden, G.W. Bush y sus respectivas familias que desde hace décadas se conocían. La diferencia está en que en el caso de los navegadores la relación ha sido cruenta desde el principio, no sólo ahora.
El primer navegador de la WWW fue Mosaic, creado en la Universidad de Illinois (EEUU) a partir de 1992. El grueso de sus desarrolladores formaron una empresa propia y lanzaron en 1994 Netscape Navigator, el navegador usado mayoritariamente en Internet durante lo años 90. En 1995 la empresa Spyglass compró los derechos de Mosaic y creó otro navegador que fue comprado por Microsoft, desarrollando a partir de ahí Internet Explorer.
Netscape vivió años dorados en los que pocos imagnaban que algún día sería literalmente barrido por Explorer. La batalla fue sonada y la victoria clara: allá por el 2002, una década después del nacimiento de Mosaic, Explorer rondaba por el 95% de usuarios.
Pero mientras tanto, algo había sucedido. En 1998 Netscape liberó el código de su suite de programas (Navegador, lector de correo, cliente de chat, lector de grupos de noticias, procesador de páginas web) y lo dejó en manos de un proyecto llamado Mozilla. Este era el nombre de la mascota de Netscape, un dragón al estilo Godzilla japonés. Mozilla 1.0 fue lanzado en el 2002 y la Mozilla Foundation fue constituida en el 2003.
A la hora de definir su estrategia contra Explorer, los desarrolladores de Mozilla optaron por dividir para vencer. No dividieron a su enemigo (en eso estaban los tribunales de Estados Unidos, en el juicio antitrust contra Microsoft) sino al propio paquete de aplicaciones, para que cada una se especializara en lo suyo. Así fue como nació el navegador Mozilla, que tras varios cambios de nombre acabaría siendo el Firefox que aspira a ir recuperando el terreno que perdió su abuelo Netscape.
Si queremos saber más sobre Firefox y su funcionamiento encontraremos muchos materiales por la red, siendo la fuente más cercana http://www.mozilla-europe.org/es/ . Firefox es de las aplicaciones más populares en la comunidad del software libre, por lo que no no resultará difícil encontrar respuestas a nuestras preguntas.
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