Como mínimo, GNU/Linux necesita una partición para funcionar. Usted puede tener una sola partición para tener todo el sistema operativo, aplicaciones y sus archivos personales. La mayoría de las personas creen que tener una partición de intercambio (swap) también es necesario, a pesar de que no es estrictamente cierto. La “Swap” es un espacio en sí dentro del sistema operativo, el cual le permite al sistema usar espacio del disco como “memoria virtual”. Dejando una partición swap separada, Linux puede hacer un uso mucho mas eficiente de ella. Es posible forzar a Linux a que use un archivo como swap, pero no es recomendable.
Sin embargo, la mayoría de la gente elige usar más que el número mínimo de particiones. Hay dos razones por las que podría querer dividir su sistema de archivos en varias particiones pequeñas. La primera es por seguridad. Si algo ocurre y corrompe su sistema de archivos, generalmente sólo afectará una partición. Así, sólo tendrá que sustituir solamente (desde los respaldos que usted cuidadosamente ha realizado) una parte de su sistema. Como mínimo, debería crear lo que generalmente se llama una “partición raíz”. Ésta contiene los componentes esenciales del sistema. Si alguna otra partición se corrompe, aún puede iniciar su sistema GNU/Linux para solucionar el problema. Esto evita que tenga que instalar nuevamente su sistema por completo.
La segunda razón, es generalmente más importante cuando se instala una maquina para trabajar, pero realmente depende del uso de su computador. Por ejemplo, un servidor de correo que recibe una gran cantidad de spam, puede facilmente llenarse y dejar sin espacio una partición, dejando el sistema inutilizable. Si usted deja /var/mail en una partición separada, por lo general su sistema seguirá funcionado perfectamente, a pesar de recibir una gran cantidad de spam.
Realmente, la única desventaja de usar más particiones es que a menudo es difícil saber por adelantado cuales serán sus necesidades. Si usted hace una partición demasiado pequeña, deberá instalar el sistema nuevamente, haciendo de nuevo las particiones que realmente usted requiere, o bien, tendrá que estar constantemente haciendo espacio en su disco duro para que no se llene completamente. Por otra parte, si usted hace la partición demasiado grande, usted perderá el espacio que se podría utilizar en otra parte. Hoy en día los discos son baratos, pero tampoco hay por qué gastar dinero innecesariamente.